Estamos iniciando una nueva etapa escolar, hoy se abre un camino que empezaremos a recorrer juntos a partir de este instante, sabiendo aceptarse y aceptar, siendo afectivos y respetuosos e intentando lograr el mejor provecho de los talentos que cada cual posee.
En esta institución, cada alumno y alumna es reconocido y valorado en lo que es como persona y en lo que hace como estudiante. Pero sólo en la escuela no podemos lograr avances si no tenemos un acompañamiento efectivo desde el hogar y la familia. Sabemos del esfuerzo que significa educar a los niños, darles valores que los acompañarán toda la vida y brindarles lo que ellos necesitan; por eso pedimos a los padres que apoyen a sus hijos y valoren el trabajo de la escuela porque tanto los padres como nosotros estamos tras un mismo objetivo:
la buena educación de los niños.